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Aliños molones

Las ensaladas nos apetecen todo el año. Son rápidas, frescas, saciantes y nos ofrecen mucha variedad. Ahora bien, el toque definitivo para que una ensalada esté deliciosa es el aliño. Además, si lo utilizamos bien, el aliño nos puede servir para enriquecer la ensalada con las grasas saludables de un buen aceite o de algunas semillas, así como para favorecer la asimilación de las vitaminas y otros antioxidantes de los ingredientes del plato. Los aliños, en su mayoría, se añaden al final de la elaboración, en el momento de servir. Os dejamos tres aliños diferentes para darle vida a vuestras ensaladas y platos.

🍋 Aliño cítrico:
aceite de oliva eco
zumo de naranja
zumo de limón o lima
sirope de agave o miel
sal

Los zumos de cítricos aquí toman el lugar del vinagre de las vinagretas. Si le añadís una cucharadita o una punta de mostaza de Dijon y un poco de salsa de soja (eliminando la sal), os quedará una vinagreta de mostaza estupenda. ¡Ponle frutos secos! Las nueces picadas serán un aporte extra de omegas y grasas saludables, además de darle textura.

🫚 Aliño asiático:
salsa de soja eco
vinagre de arroz eco
jengibre
aceite de sésamo eco
cebollino picado

Esta salsa se aligera con agua, y se suele finalizar con semillas de sésamo negro. Para obtener todos los beneficios de estas semillas, conviene partirlas o molerlas. Aunque lo tradicional es utilizar un suribachi y surikogi, lo puedes hacer con un molinillo de semillas.

🥒 Aliño fresco con yogur tipo tzatziki:
Uno de mis aliños favoritos es esta salsa fresca de yogur, muy sencilla y de inspiración griega. El tzatziki es una salsa muy fácil de veganizar, ya que basta con cambiar el yogur convencional por vegetal. Os aconsejo que sea un yogur cremoso o tipo skyr, sin sabores ni endulzantes. Necesitarás:
2 yogures cremosos Xanceda
pepino
eneldo
aceite de oliva eco
vinagre de manzana eco
ajo
zumo de limón
pimienta
sal
Para prepararlo, simplemente batimos los yogures con el resto de ingredientes.

¿Cuál te apetece probar?

Espesantes naturales

Cuando necesites espesar una salsa tienes más opciones fáciles que te permitirán conseguir una buena textura sin usar la harina de trigo ni la maicena.
Una salsa puede ser el secreto del éxito de tu mejor receta. ¿Qué podemos usar en vez de maicena o harina de trigo? 🤓
🥣 El almidón de la yuca (tapioca) también es útil para espesar las salsas sin aportar un sabor marcado. Para que no queden grumos, conviene añadirlo poco a poco a la salsa caliente e ir removiéndolo hasta lograr la textura deseada.
🥥 La harina de coco es particularmente interesante porque es baja en hidratos de carbono, rica en fibra, no contiene gluten y tiene un gran poder absorbente, por lo que no es necesario usar una gran cantidad para lograr espesar el líquido que quieras. Conviene ir añadiéndola poco a poco hasta conseguir la textura que quieras.
🖤 Las semillas de chía son muy ricas en omega-3, minerales (como el calcio o el magnesio) y fibra, y también tienen un gran poder absorbente: pueden llegar a absorber hasta 30 veces su peso en agua.
Al mezclarlas con un líquido forman un gel que resulta ideal para espesar todo tipo de preparaciones sin alterar su sabor. Puedes añadirlas enteras (por ejemplo, en mermeladas o zumos) o molidas para espesar las salsas.
🍃 El agar-agar es un espesante que proviene de las algas y no modifica el sabor ni el aroma. Se utiliza mucho para gelificar los postres, pero también es útil en otras preparaciones como las salsas.
La proporción habitual es una cucharada de agar-agar en polvo por cada 500 ml de líquido y debes añadirla con el líquido caliente. Llévalo a ebullición mezclándolo bien y, cuando se enfríe, verás que la textura se vuelve más gelatinosa.
🫗 Si añades un poco de agua a las semillas de lino molidas y esperas unos minutos, verás como se crea un gel que puedes usar para espesar salsas o sopas (mejor en frío).
🍞 El psyllium tiene propiedades aglutinantes y espesantes y puede utilizarse para espesar salsas, pero si no tienes práctica con su uso puede resultar un poco más complicado que las opciones que hemos mencionado antes, pues tiende a formar grumos.

Pesto de almendra y rúcula

Ingredientes:
100 gr de almendra repelada de La Despensa.
70 gr de rúcula fresca.
240 ml de aceite de oliva eco de La Despensa.
1 diente de ajo paqueño.
Sal rosa Himalaya de La Despensa.

Preparación:
Ponemos a remojo las almendras unas 6h. Una vez que tengamos activadas (remojadas) las almendras, las escurrimos y lavamos. Introducimos en el vaso de la batidora las almendras con la rúcula, la sal, el ajo (sin el germen) y el aceite. Batimos poco a poco hasta obtener una textura grumosa. Ya tenemos un pesto de rúcula y almendras listo para usar.

Sobrasada de tomate seco

Ingredientes:

  • 200 gr de tomates secos de La Despensa.
  • 20 – 30 almendras crudas con piel de La Despensa.
  • ½ cucharada de pan rallado eco de La Despensa.
  • 1 diente de ajo pequeño.
  • 3 cucharadas de aceite de oliva eco de La Despensa.

Preparación:

Dejamos a remojo las almendras al menos 6h. Un vez que tengamos las almendras activadas, ponemos todos los ingredientes en el vaso de la batidora y trituramos. Si vemos que la mezcla se queda muy trabada podemos añadir una cucharadita de agua para que se quede más homogénea la mezcla. Ya tenemos nuestra rica sobrasada.

Salsa tahini con zumaque

El tahini se prepara moliendo semillas de sésamo crudos o tostadas y proviene de Oriente Medio, donde se consumía ya hace siglos. El tahini es, por tanto, puro sésamo con todos sus nutrientes y beneficios. En La Despensa podéis encontrar la pasta de sésamo ecológico ya preparada. Es rico en minerales como calcio, zinc, fósforo y hierro, vitaminas del grupo B imprescindibles para el sistema nervioso, fibra, grasas saludables y fitonutrientes antioxidantes. Además favorece el salud de corazón, mejora el tránsito intestinal, tiene propiedades antibacterianas y protege el hígado y los riñones.
La mayor diferencia es entre el tahini oscuro y el tahini blanco:
Tahini oscuro: Proviene de semillas de sésamo enteras con la piel y tiene un sabor más intenso.
Tahini blanco: Proviene de semillas peladas, suele tener una textura más cremosa y líquida y es de sabor suave. Al ser pelado, contiene una cantidad ligeramente inferior de minerales.
Os dejamos la receta de esta salsa casera que preparamos para acompañar una coliflor asada 🤤:
80 g tahini
15 gr perejil picado o cilantro
1 diente de ajo
3 Cucharadas de zumo de limón
80 ml agua
Zumaque al gusto
*El zumaque o sumac es una especia muy apreciada en países de Oriente Medio, como Irán, Turquía, Líbano y Siria, dónde se suele espolvorear en los kebabs y sobre los platos de arroz, o bien lo mezclan con cebollas y lo toman como aperitivo. Su aroma es frutal, bastante intenso, y su sabor es agridulce con notas.
Preparación:
Tenemos que picar con una batidora (o robot de cocina) todos los ingredientes, menos el agua. Lo procesamos hasta que obtenemos una masa verde, y añadimos el agua. Rectificamos con más agua, si resulta espesa, o con tahini si está líquida. En este punto, os aconsejamos probarla. Para quien le guste más salada, que añada un poquito de sal, o quien le guste más ácida, que añada más limón. No debemos tener miedo a experimentar y probar hasta que quede como nos guste. Decoramos con ajo y perejil, zumaque y sésamo y si queremos.

Leche de coco en polvo

La leche de coco está elaborada 100% con cocos de cultivo ecológico procedentes de Filipinas. Tiene un alto contenido en grasas específicas del coco y es fácilmente soluble. Añadir una cucharadita al curry 🍲 y a las recetas de estilo asiático para darle un toque fresco y tropical. También se puede incorporar en recetas de repostería como batidos, avena, postres🍦 o preparar tu bebida de coco simplemente mezclándola con agua.
Te dejamos algunas ideas para usar la leche de coco en polvo:
👉 Currys: añadiendo 2 cs junto con las verduras.
👉 Salsa de yogur: añadiendo un chorreoncito de AOVE + 1 cp de curry suave + 1cp de leche de coco en polvo + 2 cs de yogur griego sin azúcar.
👉 Batido de coco (2 vasos grandes): 200g de fruta fresca + 2 cp de leche de coco en polvo + 2 yogur griego.
👉 Porridge o avena nocturna de coco: añadir 1 cp en tu taza de avena, disuelta en la leche.
👉 Bebida de coco: añadir 2 cp en una taza de agua templada, disolver y añadir a un vaso con hielo picado.
👉 Coco café latte: bates 1 cp con la leche (si es con espumadera te quedará mejor) y luego se lo añades por encima al café recién hecho.
👉 Tartas y bizcochos: añadir 2 cs de leche de coco en polvo al hacer tartas o bizcochos. Nosotros hicimos una tarta de queso con ella y quedó espectacular.
👉 Helados de coco: batir 2 plátanos y 1 mango congelados (cortado en trocitos pequeños) + 5 cs de yogur griego + 2 cs de leche de coco en polvo. Si quieres batido helado, añadir 1 taza de leche.
👉 Bechamel de coco: 2 calabacines + 1 cebolla + 2 cp de leche de coco en polvo + pizca de especias para pastel de calabaza o nuez moscada.

Labneh

El labneh es un producto tradicional del norte de África y Oriente Medio. Se elabora drenando el suero del yogur, que representa 2/3 de su volumen. Tiene la cremosidad de un queso crema, pero sin aditivos de ningún tipo y conserva todas las virtudes del yogur. El cual permanece vivo y activo. ¡Una delicia!

En La Despensa se trae por encargo (se encarga el lunes y se recoge el jueves junto con los yogures de Lolini).

Te dejamos algunas ideas para combinar:

Un tarro de Labneh  de 200gr de Lolini.

Puedes tomarlo en tostada o en un bol como picoteo acompañado de pan de pita o regañás o pan cortado. Puedes  combinarlo con diferentes opciones:

Zumaque + Aceite de oliva eco
Zaatar + Aceite de oliva eco
Mermelada de mango + semillas amapola
Tomate seco + orégano + Aceite de oliva eco
Aceitunas deshidratadas + romero + Aceite de oliva eco
Miel + granos de granada
Tahini tostado  + Miel

Salsa Ponzu casera

Este vinagre aromatizado se utiliza para aderezar muchos platos, verduras, ensaladas, pescados, carnes…

Ingredientes:

50 gr vinagre de arroz
100 gr de tamari
Zumo y ralladura de la piel de lima, limón y naranja (al gusto).

Preparación:

Mezclamos los ingredientes y batimos bien hasta obtener una salsa homogénea.

Una de las salsas más populares de la cocina japonesa y que ha irrumpido con fuerza en nuestra cocina junto a otros ingredientes y recetas de su cultura gastronómica, es la Salsa Ponzu. Le denominamos salsa, pero bien podríamos decir que es una vinagreta, pues es un aderezo con un importante punto de acidez.

De hecho, quizá alguna vez habéis escuchado que definen a la salsa ponzu como un vinagre aromatizado, pues sus ingredientes principales, además de la salsa de soja, son el vinagre de arroz y el yuzu. Ya os explicamos que el Yuzu (Citrus ichangensis x Citrus reticulata var. Austera) es un cítrico que al parecer, se originó en China, y después se introdujo en Japón y Corea. Igual que hay diferencias entre el limón y la lima, el yuzu es un cítrico con una acidez y sabor particular, es como una combinación de varios cítricos, limón, mandarina, pomelo…

Sobre el origen de la salsa ponzu hay dudas, pero hay argumentos que afirman que el nombre viene del término holandés Pons, que a su vez procede del inglés Punch (ponche, bebida con o sin alcohol que contiene jugo de fruta, en este caso de cítricos), y se complementa con el término japonés Zu, que significa vinagre. De todas formas no es una teoría confirmada.

Es difícil conocer la receta más tradicional de salsa ponzu, pues hay muchísimas variantes. No obstante es un aderezo muy fácil de elaborar, aunque no siempre se encuentran todos los ingredientes que la componen, como el mencionado yuzu, pero se encuentra solución sustituyéndolo por otro cítrico o una combinación de los que tenemos. La verdadera salsa Ponzu la deberemos degustar en Japón.

Orechiette de cúrcuma y pimienta con salsa de aguacate

Ingredientes:

250 g Pasta Orechiette de cúrcuma y pimienta eco
½ diente de ajo
1 aguacate grande y maduro
Unas hojas frescas de albahaca
Zumo de limón al gusto
Aceite de oliva eco
Sal rosa eco
Pimienta molida
Agua de cocción de la pasta
Pizca de ají
(opcional)

Preparación:

En primer lugar calentamos agua con una pizca de sal y cocemos la pasta. Cuando esté al dente la escurrimos y reservamos parte del agua de cocción.
Mientras hacemos la pasta, pelamos el aguacate y lo colocamos en el procesador de alimentos o picadora junto con el ajo pelado, las hojas de albahaca, un chorrito de zumo de lima o limón, un chorrito de aceite de oliva, sal y pimienta al gusto.
Trituramos bien hasta conseguir una salsa homogénea. Ahora, añadiremos un chorrito del agua de cocción de la pasta para que nos quede más sedosa y cremosa. Volvemos a triturar y añadimos un poco más de agua si es necesario. Decoramos con una pizca de ají y a disfrutar.